El día que Toché y Marcelo se reencontraron con el gol tras meses de sequía, fue otro ‘9’ el que llamó descaradamente la atención de El Plantío: Jon Etxaniz. Igual me equivoco porque no he vuelto a ver el partido para comprobarlo, pero no fue hasta el minuto 72 cuando le vi perder un balón en disputa con un contrario. Hasta entonces ganó todas y cada una de las batallas en las que se enfrentó a la zaga burgalesa. A Undabarrena, a Julio Rico, a Lobato, a Miki, a Cerrajería... Y eso después de abrir el marcador apenas iniciado el encuentro, cuando parte del respetable ni siquiera se había acomodado en su localidad. 

Etxaniz tiene 29 años y lleva once temporadas en Segunda B. Salió de la cantera del Athletic y ha pasado por una decena de equipos hasta que en el verano de 2018 llegó al Arenas. Con nueve tantos -incluido el del domingo- es el máximo artillero rojinegro y aún puede batir su mejor registro: 14 dianas en la 2011-2012 con el Sestao.

Escribo sobre Etxaniz porque en tono jocoso escuché decir en la grada ‘¡Caselli ficha al calvo!’, en referencia al ‘9’ del Arenas, y también por algún que otro comentario en las redes instando a Michu a anotar su nombre en la lista de futuribles. No solo no lo veo, sino que me acuerdo de Cristian López, de Barbarín, de Goiria, de Abdón Prats, de Carlos... y ¡cómo no! de Aduriz. 

Sin Diosbert Rivero, lesionado, Salmerón cuenta hoy con tres atacantes de nivel. Toché ya recordó hace unas semanas ante los medios que "siempre" ha metido goles y aseguró que iba a "seguir haciéndolos". El domingo cumplió, igual que Marcelo, que tan buenas maneras mostró al inicio de curso. Y de Juanma nadie duda. De ellos dependerá, en gran medida, las opciones de este Burgos CF, que ante el Arenas desperdició una gran oportunidad de engancharse a los de arriba... pero sigue vivo en su lucha.