Decenas de aspirantes a obtener el carné de conducir se han quedado estos días a las puertas de examinarse al no estar empadronados en la capital burgalesa, bien sea porque residían en el alfoz o porque su domicilio habitual está en otra provincia. El decreto de la Junta de Castilla y León que confinaba a Burgos incluía una serie de excepciones entre las cuales, consideraba la Jefatura Provincial de Tráfico, no estaba la de realizar esta prueba. Se trataba, añadía, de un trámite aplazable, más aún teniendo en cuenta la situación sanitaria en la que nos encontramos. Pero la decisión no sentó nada bien ni a los propios alumnos ni a las autoescuelas, que desde el jueves trasladaron su enfado tanto a la Junta de Castilla y León como a la Subdelegación del Gobierno, ya que consideraban esta medida un agravio comparativo con otras ciudades como Valladolid, León o Palencia, donde sí estaban permitiendo evaluar a personas de pueblos aledaños.

El teléfono y el correo electrónico de la Jefatura Provincial de Tráfico echaron humo durante toda la mañana del viernes. Las protestas de los profesores se agolparon después de que el jueves les anunciaran que no iban a permitir examinarse a todos aquellos empadronados fuera de la ciudad. «La norma les permite acceder para poder recibir clases y, sin embargo, les impiden examinarse. Es una decisión unilateral de Burgos, nadie más en Castilla y León la ha tomado a pesar de estar en la misma situación. No tiene ni pies ni cabeza», protestaba Atenea Martínez, de la Autoescuela Bulevar. Cabe recordar que esta medida ya se tomó en agosto, cuando cerraron Aranda de Duero y no se permitió viajar a los examinadores. «Esto afecta mucho al sector», sentenciaba. 

El jefe provincial de Tráfico, Raúl Galán, defendió que «estamos en una situación de excepcionalidad y la norma que recibimos es que la entrada a la ciudad se permitía siempre y cuando un examen sea inaplazable. Pero el de conducir no lo es». A este respecto, aseguró que tanto la Delegación de la Junta como la Subdelegación del Gobierno estaban de acuerdo con él. «Si en Valladolid o en Palencia lo están permitiendo es bajo su responsabilidad», puntualizó.