No es un hecho insólito, ya que ha ocurrido en anteriores ocasiones y en otras entidades bancarias.Pero no por ello deja de sorprender. La dirección de Ibercaja y los sindicatos pactaron a finales del año pasado un Expediente de Regulación de Empleo que implica el cierre de 199 oficinas por todo el país y la salida de 750 personas. El documento del ERE deja claro que podrán abandonar el banco, de modo voluntario, una serie de trabajadores, que tenían hasta esta semana para apuntarse a las bajas pactadas.
La sorpresa llega cuando, de esas 750 salidas la dirección ha recibido hasta 809 peticiones.En el caso de la delegación de Ibercaja de Guadalajara, La Rioja y Burgos, la entidad financiera plantea la baja de 126 empleados, mientras que le han notificado interés por abandonar el banco 141 personas, según apuntan fuentes de CCOO a este periódico. Existen tres perfiles de trabajadores que han optado por esta vía: los nacidos entre 1961 y 1963, que saldrían de Ibercaja cobrando el 85% del salario hasta que cumplan los 63 años; los nacidos antes de esos años y los de 1964 percibiendo el 75% del sueldo, mientras que los de 1965 que quieran marcharse podrán cobrar el 65%.
Con respecto a los más jóvenes que deseen incluirse dentro del Expediente de Regulación de Empleo, la dirección les ofrece irse voluntariamente cobrando su salario durante 24 meses.
(Más información, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)