Suma y sigue. Las críticas por parte del sector bodeguero a la implantación o ampliación de granjas porcinas en el territorio amparado por la Denominación de Origen Ribera del Duero no logran frenar este tipo de proyectos. El último en cuestión se ubica en la localidad de San Juan del Monte, donde un promotor ganadero ha solicitado pasar de 1.999 animales a 5.116 plazas de cebo. Es decir, más de 3.100 plazas de golpe, lo que supone un aumento del 156%. Desde ayer y durante los próximos 30 días, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León someterá a exposición pública la autorización ambiental y el estudio de impacto ambiental de esta iniciativa, para que quienes lo consideren puedan presentar alegaciones, como se ha publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León.
Esta ampliación, en una localidad que cuenta con 184 hectáreas de viñedo, numerosos viticultores y al menos tres bodegas, ha avivado el malestar entre el sector ligado al mundo del vino. José Zapatero, responsable de El Lagar de Isilla y con parcelas en San Juan del Monte, lo tacha de «barbaridad». Lamenta que «todo huele que echa para atrás y si encima lo van a duplicar...». Remarca que no está en contra de las granjas de cerdos, ya que «todo el mundo ha de ganarse la vida», pero defiende que su construcción «en medio de los viñedos de la DO Ribera del Duero y con gente que viene de fuera a conocer nuestro entorno» choca de lleno con el modelo de enoturismo.
De ahí que insista en la necesidad de regular este asunto y establecer una distancia mínima entre las granjas de cerdos y el viñedo, teniendo en cuenta el potencial creciente de los vinos de la Ribera del Duero, su prestigio tanto a nivel nacional como internacional y las inversiones que están poniendo en marcha las bodegas. No obstante, Zapatero lamenta que en la Junta de Castilla yLeón «no parecen estar por la labor». Pues bien, esta es una petición que, cada cierto tiempo, surge en el sector. A raíz de otro proyecto para construir una granja en Gumiel de Mercado que se conoció en octubre, diversos bodegueros exigieron lo mismo: una distancia entre viñas y cerdos, de forma que ambos se desarrollen en lugares distintos y así convivir.
Entre unas cosas y otras, este asunto lleva coleando al menos 4 años en toda la comarca. Cabe recordar que varios empresarios del vino han presentado alegaciones contra diversas granjas e incluso llevado a los tribunales proyectos en La Aguilera o San Juan del Monte. Aunque en este último caso, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León rechazó el recurso de dos bodegas contra una explotación porcina al entender que «no existe ningún criterio legal de incompatibilidad entre ambas actividades». Pese a este revés, el malestar no cesa. Todo lo contrario. Al ir a más, el propio Consejo Regulador se mojó de forma clara por primera vez en esta polémica en verano. En una nota, remarcaron que «no entienden, ni pueden compartir que se establezcan instalaciones de ganadería intensiva y plantas de biogás en entorno que se caracterizan por su importancia medioambiental, patrimonial y cultural».
Adiós a un mirador. En este sentido, Zapatero lamenta que tenía en mente crear un mirador en San Juan del Monte, aprovechando la belleza de la zona y que allí tiene una caseta donde antes hacía catas, pero lo ha desestimado. «No tiene sentido llevar a nadie para que huela a cerdo. El olor es tremendo. Resulta inviable llevar allí a nadie», critica, al tiempo que remarca que esto «fastidia a la parte tanto enoturística (en auge) como a la paisajística».