La Dirección Provincial de Educación ha licitado de nuevo las obras para construir otro edificio en el CIFP Río Ebro, una iniciativa que se anunció en 2021 y estaba previsto que comenzara a ejecutarse a finales de ese ejercicio. Sin embargo, fue en mayo del año pasado cuando esta delegación de la Junta hizo el primer intento para desarrollar el proyecto y entonces no obtuvo ninguna oferta. Ahora, 17 meses más tarde vuelve a iniciar el proceso, pero con algunos cambios que, entre otras cosas, impedirán que el centro de Formación Profesional disponga de su ansiada ampliación para el inicio del próximo curso.
A fin de que alguna empresa se vea atraída por la iniciativa, la Junta ha ampliado el presupuesto de las obras en torno a un 40%, hasta llegar a los 2,1 millones de euros. Eso sí, también ha incrementado el plazo de ejecución previsto en los pliegos, dado que originalmente se marcaron los 11 meses como tope máximo para finalizar los trabajos y ahora ese requisito ha aumentado hasta los 13 meses. La administración autonómica permitirá a las constructoras que presenten sus ofertas hasta el 2 de noviembre, dentro de dos semanas. Eso sí, tras ese instante deberán desarrollarse otros trámites como la adjudicación, la formalización y, por supuesto, el inicio de la ejecución.
Pero no solo eso, dado que al finalizar las obras del CIFP Río Ebro, el nuevo espacio deberá equiparse con todo el material de oficina y maquinaria requeridos porque este proyecto albergará aulas, pero también contará con una serie de talleres. Este segundo elemento, que necesita dotaciones añadidas, es clave, puesto que la ampliación del centro se diseñó desde el primer momento con el objetivo de aunar toda la FP pública de Miranda en un solo lugar. De esa forma, los ciclos del metal que actualmente se imparten en el IES Fray Pedro de Urbina dejarán sus instalaciones libres y compartirán ubicación con el resto de titulaciones de su mismo nivel.
Al margen del presupuesto y del plazo máximo de ejecución, la Junta de Castilla y León no ha realizado grandes cambios en la nueva licitación. En el diseño de la construcción se describe como un «edificio sencillo rectangular de dos plantas y cubierta plana». El piso a ras de suelo incluirá, conforme figura en los documentos oficiales, «aulas-talleres» y «vestuarios-aseos», mientras que el siguiente nivel se reservará para «despachos y aseos». Para acceder a esa planta elevada está prevista la construcción de escaleras internas, así como, una rampa exterior que rodee parte de la fachada.
En total, la ampliación, que se levantará separada del resto de bloques ya existentes, contará con algo más de 36 metros de largo y unos 13 de ancho. Es decir, ocupará cerca de 490 cuadrados de suelo y dispondrá de aproximadamente 975 metros cuadrados de superficie construida.