La Guardia Civil y la Policía Local de Briviesca han realizado una investigación conjunta tras recibir varios avisos de vecinos que la noche del pasado 21 de marzo escucharon unos disparos. Finalmente, han logrado localizar y detener al presunto autor de los hechos por dos delitos: tenencia ilícita de armas y desórdenes públicos. Se trata de un hombre de «mediana edad y etnia gitana» que reside en la ciudad y que esa noche del jueves, en torno a las 23.30 horas, sembró el pánico. 

A día de hoy se desconocen los motivos que le llevaron a disparar al aire, aunque fuentes policiales detallan que el hombre cuenta con más de «30 detenciones por delitos contra el patrimonio», entre otros.
Una testigo de lo ocurrido aclaró a DB que poco después de cerrar el local en el que trabaja se dirigía a casa y un fuerte sonido irrumpió su tranquilidad. A la altura de la Plaza Mayor presenció una escena que la provocó auténtico terror. Un «varón encapuchado», acompañado por otros «tres» individuos «disparó un arma al aire hasta en cinco ocasiones» mientras gritaba «viva España», declaró. La vecina comprobó como después de «cinco descargas» las cuatro personas se «dispersaron rápidamente». Ella huyó del lugar en el que se produjo el suceso sin avisar a ningún cuerpo de seguridad. Al día siguiente, se personó en la oficina de la Policía Local con el fin de aclarar lo que vivió y colaborar en la investigación.

Otra vecina de la zona aseguró haber «escuchado varios estruendos» pero confió que procedían de «lanzamiento de petardos». Un tercer briviescano, cuya vivienda se sitúa en la misma Plaza, declaró a este medio que «ningún ruido» le alertó, a pesar de que a esas horas se encontraba «despierto viendo la televisión». Fuentes de la Benemérita aseguraron «no haber recibido ningún aviso» sobre lo sucedido y no tenían constancia de que compañeros de otros cuarteles acudieran al lugar porque «no recibieron alertas». 

La persona que presenció los disparos al aire comentó que no «olía a pólvora» y el sonido parecía de un «arma real y no de fogueo». Sin embargo, Alejandro Angulo, jefe de la Policía Local, no encontró ningún cartucho de bala.

Tras las pesquisas realizadas consiguieron dar con el individuo que estaba detrás de los hechos, el cual fue «detenido, aunque finalmente quedó en libertad», confirman desde la Guardia Civil. Con la autorización judicial necesaria, los agentes registraron su domicilio ubicado en una zona próxima a la Plaza y no encontraron ningún arma pero sí unos casquillos de bala en su furgoneta.