El alcalde, Daniel de la Rosa, y el portavoz de Cs, Vicente Marañón, han mantenido ya los primeros contactos para crear un Gobierno de coalición en el Ayuntamiento. Las conversaciones entre ambos líderes se han desarrollado hasta el momento con total discreción y de manera informal pero la idea es iniciar una negociación en profundidad en la que las dos formaciones tendrán que ponerse de acuerdo en una estrategia común y también en el reparto de responsabilidades del futuro Ejecutivo local.

La primera exigencia de Cs será una «bicefalia» en el Gobierno a imitación de la que ya existe en otros ejecutivos en los que participa la formación naranja y cuyos acuerdos, por citar los ejemplos más notorios, sirvieron para hacer a Francisco Igea vicepresidente de la Junta de Castilla y León y a Begoña Villacís número dos del Ayuntamiento de Madrid. Aunque en estos casos los pactos se firmaron con el PP, la réplica en Burgos con los socialistas se traduciría en que Marañón sería nombrado vicealcade. El PSOE no solo no se opone sino que lo ve razonable. Por tanto, no parece que ahí se vayan a encontrar obstáculos en la negociación.

No habrá discusión, si las conversaciones llegan a buen puerto, es en que el líder de Cs asumiría también la presidencia de Promueve. Eso sí, el líder de la formación naranja exigirá disponer de recursos para hacerse cargo de una sociedad que hasta la fecha no ha conseguido carburar y de la que, al mismo tiempo que defensor, ha sido el primer crítico.

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