El Hereda San Pablo podría jugar con público en su debut en una nueva edición de la Champions League, que será el 28 de octubre en el Coliseum ante el Brindisi italiano. Sería un aforo reducido y que se debe negociar con la Junta de Castilla y León, ya que esta competición no depende del Consejo Superior de Deportes, que sí tiene la última palabra en la Liga Endesa. Y un ejemplo de ello es la decisión que se ha tomado en el País Vasco, donde el Bilbao Basket jugará en esta misma competición con 600 espectadores en su pabellón de Miribilla tras el acuerdo que ha llegado con el Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco.
Félix Sancho, presidente del Hereda San Pablo, reconoció que el club está estudiando esta posibilidad y que ya existen conversaciones para poder acoger a un grupo de aficionados en este primer partido. Además, el máximo responsable del club avanzó que también se está a la espera de la postura del Consejo Superior de Deportes sobre el posible regreso de la afición al Coliseum en la Liga Endesa, aunque admitió que sería con un aforo muy reducido, con la obligación de dejar una distancia mínima entre las localidades ocupadas para respetar las normas de seguridad.
Sancho ha hecho estas declaraciones tras el acto de presentación de un nuevo acuerdo con CaixaBank, que por tercer año consecutivo patrocinará al club burgalés.