El distinguido chef Alberto Molinero reconoce estar «muy contento» con el «público de Miranda y con la acogida» que han tenido sus cuatro restaurantes, entre los que se encuentra ERRE de Roca, que cuenta con una estrella Michelin y un solRepsol. La aceptación que registran sus propuestas no solo se ha traducido en una constante atracción para los turistas sino que, además, ha permitido convertir a su empresa en fuerte engranaje de la economía local. Tanto, que en total ronda el medio centenar de trabajadores solo en la ciudad delEbro, ya que explica que «aproximadamente por local hay una media de 8 o 10 personas y en el obrador, unas 12 o 14».

Molinero no esconde que resulta complicado encontrar personal en el sector de la hostelería, por lo que en su empresa se están esforzando por 'retener' el talento que han conseguido captar. El afamado chef apunta que para lograr ese objetivo «el tema económico es importante», aunque añade que buscan «aportar un valor añadido» a sus empleados. En concreto, dentro de ERRE, La Roca, Viva y Mercado intentan crear «un buen ambiente de trabajo» e impulsar tanto la «conciliación» permitiendo que «la gente tenga su tiempo» como «la motivación». Sobre esto último, destaca que tratan de que el personal«promocione» dentro del grupo y de ayudarle a «seguir formándose», incluso abriendo la puerta para que «vayan a otros locales para seguir aprendiendo» mientras aún forman parte de su proyecto. 

Toda esta política de empresa se da en todos sus restaurantes, pero también en el obrador situado en el polígono de Bayas. Una iniciativa que nació en 2018 y en la actualidad está generando una gran actividad para el grupo dirigido por Molinero. Según cuenta el chef, esta idea surgió para «estandarizar» en sus propios locales ciertas «elaboraciones que son más complejas o requieren otro tiempo y atención». Sin embargo, ahora las instalaciones no solo suministran a  su grupo, sino que además preparan sus productos y otros «a medida» para establecimientos diferentes. El cocinero añade que esa función también la están llevando a cabo para «distribuidores» y comenta que «el ejemplo más claro» del desarrollo que se ha registrado en este área del negocio «es la croqueta, que la tenemos presente en muchos puntos de España y sale de aquí, de Miranda».

Fuera de la ciudad. El grupo La Roca no solo es una referencia gastronómica en la ciudad del Ebro. Los platos de Molinero también se degustan en su establecimiento de Vitoria y en los dos que posee en Madrid, que, según explica el chef, «son locales incluso más grandes» por lo que sus plantillas «se van a 12 personas en cada uno».