Desde primera hora del día, en medio del bullicio de la ciudad, doce pequeños artistas se sumergen en un mundo de creatividad y emoción. Los niños, guiados por sus talentosas mentoras, están teniendo la oportunidad de explorar el arte escénico y llevar hasta el límite su capacidad de interpretación. Se trata de los campamentos urbanos de la Escuela Municipal de Teatro que se están celebrando esta semana en el Centro Cultural Francisco de Salinas y que permiten a menores de entre seis y 15 años aprender acerca de interpretación, expresión corporal, trabajo de voz y creación de textos.
Este año se trata de una edición de lo más especial, donde la sostenibilidad y el medioambiente se convierten en los protagonistas de la escena. Desde la escuela creen que un teatro es un lugar perfecto para transmitir mensajes sobre la importancia de conservar el entorno que nos rodea. «El espectáculo al final refleja la vida, por eso es importante que los niños conozcan de primera mano la naturaleza para así tomarlos como inspiración y expresarse al respecto», explicaba Laura Mesa, mentora del campamento.
Las jornadas, que se celebran de 10 a 14 horas, comenzaron el lunes con las primeras clases de expresión corporal, donde los niños poco a poco perdieron el miedo a moverse y a exponerse ante los focos y butacas. Entre muchas otras actividades, los pequeños han podido disfrutar también en importantes puntos verdes de la ciudad, como es el paseo de La Isla, para así conectar de lleno con la naturaleza y poder recibir inspiración de la fauna y flora que les rodea, además de adquirir algo más de conocimiento sobre puntos clave de su ciudad natal.
Con el paso de los días los pequeños artistas van adquiriendo mayor soltura y poco a poco están descubriendo cuál es su disciplina favorita dentro de este arte, algunos incluso ya sueñan con ser reconocidas estrellas de la gran pantalla o prestigiosos autores de drama. Y es que se trata de una disciplina muy completa que, además de ser apasionante para los más pequeños, les aporta numerosas herramientas a nivel personal pues se tienen que enfrentar a la vergüenza e inseguridad para saber realmente quiénes son. «Cuando eres pequeño, normalmente en el colegio cada uno adquiere un rol, pero en teatro puedes ser quien tú quieras. Es así cómo los niños descubren dónde se sienten más cómodos y quién quieren ser en la vida», comentaba Laura Mesa, «es interesante cómo los niños conectan sus palabras para expresar lo que están sintiendo y darse valor». Es por ello que muchos de los niños optan por apuntarse a clases durante el año escolar una vez finalizan las jornadas del campamento estival.