Si 2023 sucedió a 2022 como el año más cálido vivido en la provincia desde que hay registros, el 2024 ha arrancado también con datos récord. Los primeros 31 días de este curso son los más calurosos jamás certificados por la base de datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Entre el 1 y el 31 de enero la temperatura media que ha anotado la estación situada en el aeropuerto de Villafría ha alcanzado los 5,58 grados centígrados. 

Por poner en contexto, el promedio histórico era de 3,1 grados, es decir, casi la mitad. Tomando como referencia los meses de enero de la última década, 2024 sucede a 2016 como el estreno de ejercicio más cálido. Ese año se alcanzó una media de 5,3 grados, aunque en otros, como por ejemplo 2021 y 2015 apenas se llegó a los 2,1 y 2,1 grados respectivamente. En 2022, por no ir más lejos, los termómetros se movieron alrededor de los 3,2 grados, en clara sintonía con las estadísticas que recoge la Aemet.

En el conjunto de Castilla y León, el organismo estatal confirmó el martes que se había registrado el segundo inicio de año más cálido solo por detrás del de 2022. La mayor anomalía la han presentado las temperaturas diurnas, 2,4 grados superiores a su promedio. El día más cálido ha sido el día 16 con 10,3 grados de media, mientras que el más frío ha sido el día 8 con 0,2 grados de promedio.

Enero de 2024 ha sido un periodo de constantes cambios meteorológicos. El año arrancó con temperaturas superiores a la media, aunque desde la víspera de Reyes el mercurio se desplomó. Hasta el día 13 se produjeron heladas de madrugada salvo el día 10, llegando incluso a no rebasar los 0 grados de promedio la jornada del lunes 8.

A partir del segundo fin de semana de 2024 el clima cambió de manera radical y las temperaturas se asimilaron más a abril o mayo que a pleno invierno. El 16 y 17 fueron los días más calurosos con una media de 10,2 y 10,4 grados, mientras que el sábado 20 se rebasó la máxima histórica de 19 grados vigente desde el 29 de enero de 1944.

Ocurrió el sábado 27 a las 14:20 horas de la tarde, cuando el mercurio se elevó una décima sobre el tope de hace 80 años y llegó a los 19,1 grados. Por contra, las jornadas del 19 y 20 la media se quedó en los 1,2 grados bajo cero. Ese último día se anotó la mínima más baja en lo que llevamos de 2024, -8 grados a las 7:30 horas. La temperatura media mensual más alta también ha pulverizado su registro más alto. Los 9,8 grados baten los 9,5 de enero del año pasado.

Más lluvia. En cuanto a la precipitación, la base meteorológica del aeropuerto de Villafría se quedó en los 34,9 litros por metro cuadrado -sin rastro de nieve-. Se trata de un registro notablemente superior a la media, al igual que ha ocurrido en el conjunto de Castilla y León. Según la Agencia Estatal de Meteorología, el superávit ha alcanzado el 18%, lo que confiere el carácter de «húmedo» a ojos de este organismo estatal.

No obstante, la distribución de la lluvia a lo largo y ancho de la provincia ha sido algo desigual: si bien en el flanco sur ha caído más de lo habitual, en el norte ha sido seco. En la meseta la Aemet confirma que se trata de un mes de enero «normal».