La décima edición del Festival de Charangas de Poza de la Sal ha vuelto con toda la fuerza de su música otro año más. Las charangas han llenado de nuevo las calles de vida y la gente ha respondido generando un gran ambiente. Con las vías decoradas y con las plazas abriendo un hueco a las interpretaciones musicales generan una diversión constante para todo aquel que se acerca.
Este año uno de los aspectos en los que se ha avanzado es en seguridad y limpieza. «Los vecinos eso es lo que me transmiten. No ha habido botellón tampoco ni problemas grandes porque no les hemos dejado tampoco subir al pueblo con las bebidas», relata el alcalde del municipio pozano, Domingo Núñez.