Mientras que en Aquel Burgos sombrío donde fuimos felices lo que aglutina los relatos de Jesús Carazo son los paseos, calles, cines o espacios de la ciudad en los años 50 y 60 del siglo pasado, en ¡Este chico es tonto! recopila sus memorias literarias. «He utilizado los recuerdos como punto de partida de unas memorias que son apuntes literarios. No me interesa tanto el relato de los acontecimientos como los sentimientos, emociones y vivencias», explicaba el escritor en 2013, cuando se publicó el libro.

A partir de este viernes Jesús Carazo comparte con los lectores de Diario de Burgos esas evocaciones del niño que estudió en un colegio de frailes estricto y constreñido por la religión, el adolescente que sentía predilección por las niñas rubias de ojos azules, el joven atormentado por la muerte y por la vida y el chaval que se entusiasmaba con algo con tanta facilidad como lo dejaba relegado. El volumen se irá publicando semanalmente en la contraportada de los viernes, como ocurrió con Aquel Burgos sombrío donde fuimos felices entre octubre del año pasado y junio del actual.  

Con ¡Este chico es tonto!, exclamación que a menudo le dedicaba su padre ante las supuestas impertinencias de la criatura, podremos conocer los entresijos de algunas de sus obras literarias o imaginarnos a Carazo antes de ser escritor. Porque el autor de El soñador furtivo, seleccionada por la Fundación Germán Sánchez Ruipérez como una de las cien mejores novelas juveniles del siglo XX, no se planteó dedicarse a la literatura hasta cumplir los 40 años, que es cuando publicó su primera novela. «No me duraba ninguna afición. Todo lo abandonaba, tanto a las novias como a las musas», rememoraba al recordar la colección de sellos, su incursión en el mundo del rock, la escritura, la pesca... «Nunca pensé que la literatura pudiera ser mi única forma de vida -de hecho lo compaginé con mi labor como profesor-. Supongo que mantenía una falta de obstinación, de seguridad en mí mismo...», recordaba para este periódico.

Carazo es autor de Los límites del paraíso (finalista del Premio Nadal), Último verano en el paraíso (Premio Lope de Vega de Teatro 2004), La ciudad donde habita Caribdis (Premio Sésamo), Secretum (Premio Ciudad de Barbastro) o Los abismos de la noche (Premio Ateneo-Ciudad de Valladolid), entre otros títulos.