El CD Mirandés está pendiente de la evolución de dos de sus futbolistas: Álvaro Sanz, que se lesionó la semana pasada durante un entrenamiento, y Pablo Tomeo, que el sábado abandonó el césped pasada la hora de juego en el amistoso ante el Amorebieta. 

El centrocampista aragonés sufre una lesión muscular en el aductor largo de su pierna derecha, según los resultados de las pertinentes pruebas médicas a las que se ha sometido tras el percance ocurrido durante una sesión preparatoria el miércoles. Desde entonces, Álvaro Sanz no se ha ejercitado con el grupo y aunque viajó a Amorebieta junto a sus compañeros, no estuvo disponible para Alessio Lisci en el primer amistoso de pretemporada de los rojillos. La recuperación del canterano del FC Barcelona queda pendiente de evolución.

Por su parte, el club también está pendiente de otro centrocampista, Pablo Tomeo, que el sábado abandonó el partido ante el Amorebieta en el minuto 61 con problemas en su rodilla izquierda. Después de una primera valoración por los servicios médicos del Mirandés, el exjugador del Huesca será sometido a una exploración más profunda este miércoles para esclarecer el alcance de su lesión. 

Estos contratiempos se unen a la escasez de efectivos de la primera plantilla con los que cuenta Alessio Lisci. Tras la anunciada marcha de Michelis al filial de Osasuna, el joven técnico italiano cuenta con 12 futbolistas: Ramón Juan, Diego Moreno, David Vicente, Sergio Barcia, Barbu, Alcedo, Álvaro Sanz, Alberto Reina, Pablo Tomeo, losifov, Gabri Martínez e Ilyas Chaira.