Diario de Burgos

El conflicto con Cepsa afecta a la flota municipal

C.M.-D.A. / Burgos
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Los servicios se ven obligados a pagar la gasolina mediante anticipos de caja y algunos solo tienen dinero hasta el sábado. Los coches de gasoil están repostando en las cocheras de buses

La estación de servicio está ubicada en el paseo de Fuentecillas. - Foto: Alberto Rodrigo

Las tensiones entre el Ayuntamiento y Cepsa a raíz de la resolución del contrato que ha vinculado a ambas partes durante 25 años por la explotación de la gasolinera de Fuentecillas, y que todavía está pendiente de resolverse, va más allá de los perjuicios derivados del cierre de las instalaciones desde la última semana de mayo. La situación ha acabado afectando a la flota automovilística municipal hasta el punto de tener que repostar en otras estaciones de servicio y abonar la gasolina mediante anticipos de caja de cada uno de los servicios, algunos de los cuales solo tienen dinero para afrontar ese gasto hasta el sábado como es el caso de la Policía Local. A partir de ahí, la movilidad quedaría comprometida.

Mejor suerte están teniendo los servicios que disponen de vehículos que se mueven con gasoil o gas natural comprimido (GNC), dado que se ha dado orden de que acudan a repostar a las cocheras de los autobuses urbanos de la carretera Poza.

El concejal del PSOE Josué Temiño mostró su preocupación sobre esta situación en la reunión que el Consejo del Servicio de Movilidad y Transporte Urbano mantuvo el lunes tras conocer que en Almacenes Municipales no había podido atender la petición de un barrio para el suministro de una sillas para un acto por falta de combustible.

El conflicto con Cepsa se generó a raíz de que esta empresa se negó a suministrar combustible al Consistorio si no abonaba las facturas en un plazo de nueve días, lo que el concejal del área no aceptó. La gasolinera se quedó sin suministro, lo que obligó a su cierre.

El concejal, optimista. El concejal de Movilidad, José Antonio López, anunció la "inmediata" reanudación del servicio. "La situación ha cambiado radicalmente", avanza. El edil destaca que la solución "transitoria" ha cumplido con su cometido, puesto "que nadie se ha quedado sin suministro y no se ha dejado de prestar servicios por carencia de combustible". "Decir lo contrario es radicalmente falso".

Mientras la estación de Fuentecillas recupera la normalidad en los próximos días, el Ayuntamiento trabaja en una doble actuación para tener el control del suministro de su flota. De un lado, la administración recuperará la gestión de la gasolinera y sacará a concurso la concesión demanial de su gestión. De otro, Asesoría Jurídica articula los detalles de un nuevo contrato del suministro del combustible para los vehículos municipales.