Diario de Burgos

«Burgos es un Ferrari que conducimos en segunda»

J.M.P. / Burgos
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El empresario Jesús Ojeda, expresidente de la FEC, es el segundo Mejor Tertuliano del Año, galardón que reconoce desde 2022 a los opinadores de Onda Cero y La 8 Burgos

Ojeda, con su vocera, al lado de los estudios de Onda Cero y las metopas que recuerdan a Jesús Echevarrieta y Tino Barriuso. - Foto: Valdivielso

23 de mayo de 2005. Unos minutos después de la una del mediodía. Álvaro Melcón daba la bienvenida a los oyentes de Onda Cero Burgos a Escaño Cero. Junto al ahora director de Diario de Burgos se sentaban en el estudio Nacho Camarero y los añorados Tino Barriuso y Jesús Echevarrieta. Al frente de la técnica, Lou Matilla. Comenzaba una tertulia que pronto se convirtió en referente en el análisis de la actualidad de la provincia. Voces autorizadas e independientes afilaban el colmillo a diario para hablar del devenir de Burgos y sus gentes. 

No tardó en incorporarse a esa nómina de opinadores Jesús Ojeda. Fue tras dejar su cargo de presidente de la Federación de Empresarios de Comercio.

En la decimonovena temporada de Escaño Cero, Jesús Ojeda se ha convertido en Tertuliano del Año. Un premio que se puso en marcha en 2022 en honor al inolvidable Jesús Echevarrieta, fallecido el 18 de mayo de 2014 a los 66 años. El que fuera presidente de la Asociación de empresarios de Villalonquéjar ha dejado una huella imborrable entre sus compañeros de tertulia y en una ciudad que adoraba y por la que tanto peleó. Lo hizo desde su responsabilidad empresarial, pero también, como buen filántropo, defendiendo numerosas causas y apoyando a un sinfín de colectivos. 

No disimula Ojeda la emoción que le ha causado un reconocimiento tan entrañable. Es un fijo del programa de los lunes, donde comparte debate con otros empresarios que, como él, están pegados a la calle, entre los que se encontraba el propio Echevarrieta. Para él es un privilegio poder expresar su opinión públicamente. Prudente por naturaleza, reconoce que no se ha tenido que morder la lengua, «ni me han dicho que me la muerda». Asume, eso sí, que no puede hablar de todo «a calzón quitado», porque nunca se ha considerado poseedor de la verdad absoluta. «No pretendo que nadie esté de acuerdo conmigo ni convencer a nadie. Soy un burgalés más que dice públicamente cosas que piensa. Lo que más me gusta es el buen tono, el respeto a lo que opinan los demás». Defensor a ultranza de la tolerancia, huye de tertulias en las que se pasa del argumento al «esto tiene que ser así porque lo digo yo». 

Escaño Cero es un programa hecho a pie de obra, en el que los tertulianos se comprometen con Burgos a través de sus opiniones sobre asuntos que preocupan a los habitantes de la provincia.

Ojeda no oculta su pesar por no sacar partido a todo el potencial que tiene Burgos. «Me encanta Burgos. Siempre tengo la sensación de que tenemos un Ferrari y lo conducimos sin pasarle de segunda». Le gusta hablar mucho de las grandes posibilidades de desarrollo de la provincia y le da «pena que siga habiendo gente de otras tierras que piense que aquí no hay nada».