Araúzo de Miel fue el escenario elegido para celebrar un nuevo Día de la Provincia, el primero del nuevo mandato político, en el que los mensajes de unión y reivindicación fueron protagonistas.
El presidente de la Diputación, Borja Suárez, destacó en esta «fiesta del municipalismo» la importancia del apoyo del resto de las administraciones porque «sin ellas, no se podría entender la provincia de Burgos». «Entre todos defendemos lo mejor posible los intereses de los municipios y construimos un territorio donde sea más fácil vivir y haya mejores servicios», explicó.
En esta jornada de encuentro de las entidades locales quedó plasmado «el sentir de los 371 ayuntamientos». «Tanto las necesidades como los retos están marcados y por eso la reivindicación se hace desde el respeto para garantizar el futuro de esta tierra», resumió Suárez.
El acto institucional celebrado en la parroquia de Santa Eulalia de Mérida contó con la presencia de los alcaldes (también pedáneos y presidentes de juntas administrativas), diputados, senadores, procuradores, representantes de las fuerzas del Estado y la del consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez. Durante la jornada se rindió homenaje a los alcaldes que finalizaron su labor tras el último proceso electoral y premió a los municipios más destacados en las Premios Provinciales. Todo,sin olvidar el reconocimiento al que fuera presidente de la Diputación, César Rico.