Hace once meses Andy Rodríguez vivía uno de los momentos más duros de su carrera deportiva. Se disputaba la segunda jornada de Liga en Albacete y en la primera parte el futbolista del Burgos caía lesionado en su rodilla izquierda. Desde el primer momento se temió lo peor, pero llegó al descanso. No salió en la segunda parte y pronto se conoció la gravedad de su lesión, rotura del ligamento cruzado de su rodilla, una de las lesiones más graves que puede sufrir un futbolista y que te deja casi un año fuera de los terrenos de juego. 

Volvió en la parte final de la pasada campaña, pero ha sido ahora, en pretemporada, cuando ha comenzado a entrenar con normalidad.

«Estoy muy bien, no tengo ningún tipo de molestia en la rodilla. Ahora se trata de coger ritmo en esta pretemporada. Desde el primer día de entrenamientos he trabajado como uno más y quiero estar preparado para el inicio de Liga», aseguró Andy tras concluir el partido ante el Amorebieta.

«Cuando comience la Liga habrá pasado casi un año desde la lesión y eso es bueno para mí y para la rodilla, para mi confianza», continuó el jugador.

Sobre el partido ante el Amorebieta, cree que el equipo notó el gol del rival: «Luego hemos bajado un poco, pero estos partidos sirven para sumar minutos, además no ha habido lesionados, que también es importante. Tuvimos ocasiones de sobra para haber marcado algún gol. Lo importante es acumular minutos y trabajo y llegar al inicio de Liga en buen estado».

También habló del cambio de estilo entre Calero y Bolo: «Cada entrenador tiene su método y su idea y nosotros tenemos que cogerla lo antes posible, tener predisposición para estar lo mejor posible en el primer partido de Liga. La pretemporada sirve para ir avanzando, corregir errores e ir cogiendo su idea de juego».